Premiar la innovación cultural

Ya están en línea las bases del Premio Internacional a la Innovación Cultural. La recepción de proyectos está abierta hasta el 5 de febrero de 2015.

Reggie Dixon en una pantomima en el teatro Sunderland Empire.

Reggie Dixon en una pantomima en el teatro Sunderland Empire. Fuente: Tyne & Wear Archives & Museums.

Ya están en línea las bases del Premio Internacional a la Innovación Cultural, una de las veinte acciones que el CCCB ha creado para celebrar su vigésimo aniversario. El objetivo del premio, que será bienal, es estimular los proyectos que exploren los posibles escenarios culturales de los próximos años fomentando la investigación, experimentación y evolución que requiere el desafío del futuro. Este artículo es una síntesis de las ideas y los criterios establecidos para su primera convocatoria que encontrareis completas en www.innovationcccb.org.

Estáis todos invitados a participar: la recepción de proyectos está abierta hasta el 5 de febrero de 2015.

Las razones del premio

El Premio Internacional a la Innovación Cultural es una consecuencia de la tradición creativa del CCCB en sus veinte años de vida. En 2007 acuñamos la sigla I+C+i [1] convirtiéndonos en una de las primeras instituciones en el ámbito catalán y español que incorpora una línea de trabajo basada en la investigación e innovación en cultura. La adaptación y evolución de las instituciones culturales en un contexto cambiante [2] han transformado el I+D cultural en un instrumento de primera necesidad. La nueva praxis sugiere un proceso de transición, en que nadie está exento de revisar sus criterios operativos: las ideas con las que se crean y conciben los proyectos, las metodologías de trabajo, los procesos de producción, los estilos de representación, la capacidad para ser sostenibles o no; las formas de comunicar, diseminar y compartir el conocimiento.

El premio plantea tres grandes áreas de trabajo que estarán reflejadas en sus bases.

  1. Estudiar, desarrollar y divulgar un cuerpo teórico emergente que permita una reflexión crítica sobre los dilemas y desafíos a los que se enfrenta el mundo cultural, incluida la necesidad de puentes o nexos permanentes entre disciplinas humanistas y científicas.
  2. Potenciar la incubación e investigación de nuevos géneros y formatos, sin olvidar la necesaria renovación de los géneros y formatos tradicionales, en un escenario mutante donde cobran especial importancia los procesos abiertos, el desarrollo de plataformas y la creación de redes.
  3. Favorecer aquellas propuestas y proyectos que, cumpliendo los requisitos mencionados en los puntos anteriores, incorporen fórmulas innovadoras de viabilidad.

Un ejercicio de prospección [3]

Uno de los objetivos del Premio Internacional a la Innovación Cultural es explorar posibles escenarios culturales en los próximos años. ¿Qué géneros y formatos sobrevivirán a la revolución digital y a la crisis económica? ¿Qué tipo de exposiciones serán visitadas por los nativos digitales? ¿Cuáles serán sus pautas de consumo cultural? ¿Qué evolución (o involución) sufrirá el gran llamado a la participación de los últimos años? ¿Cuál es el futuro de los festivales? ¿Qué efectos provocará el exceso de información y cuáles son las herramientas para crear un mundo inteligible? ¿Cuáles son las formas de prescripción que aceptará (o no) el «antes llamado público»? ¿Qué estilos de mediación serán necesarios entre expertos y profesionales y el crecimiento de prosumers y amateurs? ¿Evolucionan las webs institucionales hacia portales de contenido? ¿Cuál es el futuro de los archivos analógicos y digitales? ¿Qué alteraciones sufrirá el concepto de «programación»? ¿Qué significa «educar» en un contexto hipertecnificado? ¿Cuál será la misión de los gestores culturales?

Las preguntas se multiplican y las respuestas no son unívocas. Anticipar escenarios posibles es un modo de atenuar la incertidumbre, desde el aprendizaje continuo y el desarrollo de capacidades adaptativas. Si es cierto que las instituciones culturales se comportan como organismos vivos que interactúan en ecosistemas complejos, cabe potenciar al máximo estrategias y planificaciones que favorezcan la creatividad y la innovación. Y el acceso democrático al conocimiento, a los medios de producción y reproducción, como derechos inalienables de los ciudadanos. La selva de las jergas y los idiolectos, de las modas y tendencias, no debería impedir una clara reformulación de las funciones y los objetivos de una institución cultural. Y la apuesta por un discurso articulado e integrador. En este sentido, los modelos y prototipos, concebidos como «sondas» que exploran los futuros posibles de la cultura, pueden ser un recurso de primer orden.

Primera convocatoria

Cada edición del premio propondrá un tema sobre el que deberán trabajar los proyectos presentados. En esta primera convocatoria el tema elegido es PÚBLICO/S: ¿Qué podemos entender hoy por público/s en los centros culturales, museos y espacios análogos? ¿Cuál es el significado de este concepto en un momento en el que las fronteras entre el espacio físico y el espacio virtual se diluyen, se mezclan o se confunden? ¿Se ha alterado el paradigma clásico según el cual el público seguía y a lo sumo participaba –aunque siempre ocupando una posición secundaria– en las propuestas de los centros y museos? ¿Cuáles serían los nuevos modelos que se aplican actualmente en este ámbito? ¿Cuáles son las necesidades reales de estos nuevos públicos? ¿Las satisfacen los centros y museos? ¿Qué innovaciones podrían introducir para cumplir su cometido? ¿Cuáles son los cambios necesarios para afrontar el reto del/de los público/s en los próximos años?

Los autores que opten al premio deberán presentar un proyecto de creación, producción y/o presentación de contenidos culturales cuyo formato, tema y/o modo de gestión respondan de manera innovadora a estas preguntas o a otras relacionadas. Los proyectos concursantes deben estar fundamentados teóricamente y presentar un análisis del ámbito concreto de actuación en el que pretenden incidir, siguiendo la estructura establecida en las bases.




Criterios de selección

Un jurado integrado por expertos en el tema de la convocatoria premiará el proyecto más innovador obedeciendo, fundamentalmente, a los siguientes criterios:

  • Originalidad de la propuesta. El proyecto ha de destacar por su carácter de «novedad», en términos absolutos o por la combinación inédita de temas, géneros, formatos o modos de gestión ya conocidos.
  • Rigor conceptual y metodológico. El proyecto debe sustentarse en un marco teórico coherente y su propuesta de desarrollo ha de estar guiada por las herramientas y métodos adecuados, demostrando su capacidad para ofrecer soluciones a los problemas y preguntas planteados.
  • Innovación en las formas de relación con el público. Se valorarán aquellas propuestas que resignifiquen y transformen las formas de relación convencionales de los museos y centros culturales con los ciudadanos, aportando nuevas maneras de integrar en sus dinámicas de creación, gestión y distribución de los contenidos a un público cada vez más activo y participativo.
  • Transversalidad de las acciones y los métodos. Se valorará la voluntad de incorporar al ámbito cultural procesos, métodos y dinámicas característicos de otros ámbitos y disciplinas que puedan enriquecer y facilitar la relación de las instituciones culturales con los ciudadanos.
  • Impacto social del proyecto. Se valorarán las propuestas sustentadas en una vocación de servicio público, orientadas a reducir las brechas existentes en el ámbito sociocultural y a fomentar el uso y cuidado del espacio comunitario (físico y virtual).
  • Viabilidad del proyecto. El proyecto presentado debe ser viable económica y organizativamente.

Finalmente, el Premio Internacional a la Innovación Cultural nace de la convicción de que existe una gran reserva de creatividad dentro y fuera de las instituciones culturales. Tender puentes entre la capacidad innovadora de la ciudadanía y el conocimiento y la experiencia acumuladas por las instituciones que están a su servicio, es una de las ideas centrales que ha inspirado este premio.

Esperamos vuestras propuestas en www.innovationcccb.org.


[1] Véase «I+C+i Un modelo de Investigación e Innovación emergente en España», de María Jesús Muñoz Pardo (2009). Disponible en http://oa.upm.es/3179/

ICIPedia (2012). Disponible en http://blogs.cccb.org/icionline/es/

[2] Un contexto sometido a intensas transformaciones que van del impacto de las nuevas tecnologías a las crisis de las industrias culturales clásicas, de la emergencia de un público cada vez más activo y participativo a los cambios de paradigma provocados por la erosión de fronteras disciplinarias, los avances de la cultura tecnocientífica y el nacimiento de nuevas disciplinas.

[3] Las dos acepciones que el diccionario otorga al término son legítimas para orientar nuestra búsqueda. La primera como una metáfora de lo que conlleva un proceso abierto de investigación e innovación en cultura: la exploración de ideas, proyectos y recursos ocultos. La segunda, como la capacidad de anticipar escenarios posibles.

prospección. (Del lat. prospectĭo, -ōnis).

1. f. Exploración del subsuelo basada en el examen de los caracteres del terreno y encaminada a descubrir yacimientos minerales, petrolíferos, aguas subterráneas, etc.

2. f. Exploración de posibilidades futuras basada en indicios presentes. Prospección de mercados, de tendencias de opinión.

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